martes, 30 de diciembre de 2014

Eventos exteriores y estados interiores

“Combinar estados interiores con acontecimientos exteriores en forma correcta es saber vivir inteligentemente” 1

Participamos en fiestas, en eventos familiares, del trabajo, con amigos, vamos de vacaciones, de excursiones, paseamos… continuamente establecemos relaciones con personas y con el mundo exterior… Son muchos los eventos en los que participamos y las situaciones que diariamente pasan por nuestras vidas. Te has preguntado alguna vez: ¿Mi estado interior es correcto en cada uno de esos momentos? ¿Te sientes cómodo? ¿Estás bien, te sientes en armonía, equilibrado en cada una de estas situaciones y con las personas que ahí hay?

no sabemos gestionar las emociones ni los pensamientos
La verdad es que en muchas ocasiones no estamos ni cómodos ni bien, el estado interior no coincide para nada con el evento exterior. No hay armonía, en ocasiones hay estados interiores negativos, equivocados que no nos permiten vivir de forma equilibrada los eventos exteriores, por lo tanto no tenemos paz interior.

No estamos hablando ahora de momentos en que el exterior es caótico o que ocurren cosas negativas, no.

lunes, 8 de diciembre de 2014

Maldito don la belleza

¿Porque no nos sentimos bien con nosotros mismos, con nuestro cuerpo?

Sentado en la estación ante mí veo desfilar los pasajeros ya llegados a su destino. Destacan entre todos ellos unas jóvenes alegres en las cuales la madre naturaleza se recreó y dejó plasmado en ellas el don de la belleza.

Los elementales y las ninfas otrora admiradas por su belleza y pureza ya no son visibles por nuestros ojos mortales, los tiempos han cambiado. El ser humano ya perdió su inocencia y se encuentra avocado a un fatal destino, cual es el de vivir un Kaliyuga, después de haber respirado el aire puro y haberse alimentado con hidromiel en una edad de oro ya olvidada.

ser bello puede ser un problema
La belleza siendo un don es hoy maltratada y manipulada.
Es aquí y hoy en este nuestro mundo donde la belleza sufre encarcelada. La belleza interna, sufre porque se siente oprimida, débil y exhausta después de una eternidad sin ver la luz. Es nuestra Bella durmiente, la Blanca Nieves atrapada por los siete enanitos, es la Bella atrapada por la bestia, es la conciencia dormida en cada uno de nosotros. Pero la otra, la belleza física, la exterior, también sufre. 

Otra vez, ahora en otra estación, se repite la misma canción. Veo nuevamente belleza, pero mi extrema limitación de hombre mortal no me permite ver que en cada una de las personas y en todas sin excepción hay belleza, más evidente o más oculta, pero está ahí.

La crisis y la vaca

Las crisis se pueden resolver, este cuento de la vaca nos servirá de guión para autodescubrirnos.

Dicen los sufís que para todo en la vida se necesita de un esfuerzo; la madre necesita hacer un esfuerzo para hacer crecer a su hijo, el trabajador necesita de esfuerzo para conseguir el dinero que le permite vivir... En determinados momentos y de forma cíclica se necesita de sobre-esfuerzos (super-esfuerzos) para que eso que ya esta en marcha dé una octava superior y no decaiga. Así, si tenemos un negocio o una casa el esfuerzo diario nos permitirá tenerlo habitable y en marcha, es el esfuerzo de poner orden, tenerlo arreglado y limpio, por ejemplo; pero al pasar diez o veinte años será necesario hacerle alguna reforma de mayor envergadura que nos pedirá un sobre-esfuerzo. En caso de no hacerlo empezará a reinar la entropía, puertas que no funcionarán, la pintura se vera vieja y todo empezará a arruinarse paulatinamente,... decaerá el edificio. Así pues esto ocurre indistintamente que estemos en un camino espiritual o no. La ley se cumple.

Una fábula cuenta:
problemas personales que llevan a crisis
La vaca y la crisis

 "Un maestro de sabiduría paseaba por un bosque con su fiel discípulo, cuando vió a lo lejos un sitio de apariencia pobre, y decidió hacer una breve visita al lugar. Durante la caminata le comentó al aprendiz sobre la importancia de las visitas, también de conocer personas y las oportunidades de aprendizaje que tenemos de estas experiencias”.

“Llegando al lugar constató la pobreza del sitio, los habitantes, una pareja y tres hijos, la casa de madera, vestidos con ropas sucias y rasgadas, sin calzado, entonces se aproximó al señor, aparentemente el padre de familia y le preguntó: ¿En este lugar no existen señales de trabajo ni puntos de comercio tampoco, como hacen el señor y su familia para sobrevivir aquí?”